La Osteopatía es la ciencia que estudia el movimiento de todas las articulaciones del cuerpo de forma a corregir mediante manipulaciones, cualquier alteración patológica que pudiera perturbar o impedir dicho movimiento.
Es una terapia manual que aplica una serie de maniobras de movilización sobre estructuras tendinomusculares y articulaciones, con el fin básico de producir un “desbloqueo” consistente en separar las superficies articulares en tensión para restablecer la biomecánica.
A diferencia de los humanos, el sistema nervioso central de los caballos es hipersensible. Esto tiene dos lecturas: la primera es que a la hora de manipular una estructura equina (vértebra, iliaco, rótula…), el movimiento correctivo debe ser muy suave ya que el riesgo de causarle dolor existe, posibilidad mucho más remota en un ser humano. La segunda lectura es mucho más positiva; esta sensibilidad del sistema nervioso hace que la curación del problema mecánico necesite, en muchos de los casos, de una sola sesión, algo impensable en los seres humanos. Esto no significa que nuestro amigo no se vuelva a lesionar la misma estructura ya que puede ser propenso a esa lesión.
Orígenes y aplicación de la osteopatía a los caballos
La Osteopatía es una ciencia que puede reportar numerosos beneficios y completar los cuidados que habitualmente reciben nuestros caballos. Estamos ante una terapia que, junto a la Homeopatía, nos dará soluciones prácticas para la buena salud de los equinos.
La Osteopatía es una ciencia que puede reportar numerosos beneficios y completar los cuidados que habitualmente reciben nuestros caballos. Estamos ante una terapia que, junto a la Homeopatía, nos dará soluciones prácticas para la buena salud de los equinos.
La Osteopatía es la ciencia que estudia el movimiento de todas las articulaciones del cuerpo, con el fin de corregir, mediante manipulaciones, cualquier alteración patológica que pudiera perturbar o impedir dicho movimiento.
Se trata de una terapia manual que aplica una serie de maniobras de movilización sobre estructuras tendinomusculares y articulaciones, con la finalidad básica de producir un “desbloqueo” que separe las superficies articulares en tensión, para restablecer la biomecánica.
La limitación del movimiento en las articulaciones se origina por la tensión de los ligamentos, de la retracción de los músculos, de las adherencias… y es lo que se denomina bloqueo articular.
Es muy importante diferenciar la lesión osteopática de la traumática, en la que existe destrucción de estructura. La lesión osteopática puede provocar inflamaciones, pinzamientos…, pero en su origen no hay destrucción, por lo que manipulando adecuadamente podemos restablecer el movimiento articular, y de esta forma eliminar el dolor.
Osteopatía equina
La osteopatía resuelve bloqueos en el sistema musculoesquelético que inhiben un movimiento fluido. Además, concibe el animal como un conjunto, más que meramente la suma de posibles lesiones individuales. Un caballo que, por ejemplo, tiene un bloqueo en el cuello no podrá doblar tanto en un lado cómo en el otro. Puede ser que el problema primero venga del cuello, pero muchas veces el problema del cuello es secundario a un bloqueo en la cadera o en las vertebras lumbares.
Después de haber manipulado, el caballo debe seguir un programa de rehabilitación durante entre 1 y 6 semanas para evitar bloqueos nuevos y para que el sistema tenga tiempo para adaptarse otra vez.
Tratamiento combinado
La fisioterapia y la osteopatía son complementarias y tienen el mismo objetivo: recuperar el movimiento libre del caballo y estimular la curación de lesiones. Dependiendo del caso, se aplica una o la otra, aunque en muchas ocasiones el tratamiento es una combinación de las dos para optimizar el efecto. En caso, por ejemplo, de que los músculos tengan demasiado tensión en una región que no es posible manipular, relajo primero los tejidos blandos circundantes antes de desbloquear una articulación.
Las indicaciones para tratar a un caballo mediante fisioterapia y osteopatía pueden ser:
Inflamaciones de músculos, ligamentos, tendones, articulaciones y bursae.
– Lesiones después de un trauma o por consecuencia de sub- o sobrecarga.
– Rehabilitación posoperatoria.
– Artrosis.
– Heridas, cicatrices.
– Sensibilidad del dorso.
http://www.osteopatiaequina.com/quees.htm
http://www.ecuestre.es/caballo/salud/articulo/origenes-y-aplicacion-de-la-osteopatia-a-los-caballos